La miopía es un padecimiento que afecta a millones de niños y adultos y ha ido en aumento en los Estados Unidos durante las últimas décadas. Es el más común de los errores refractivos— o condiciones del ojo— en el cual los objetos cercanos pueden verse claramente, mientras que aquellos que se encuentran a distancia se ven borrosos.
Muchas familias han transmitido la miopía por varias generaciones, pero algunos especialistas del cuidado visual creen que el aumento en el uso de computadoras y la fatiga ocular, en conjunto con el factor hereditario, podrían estar afectando la incidencia hoy en día. Aunque se desconoce la verdadera razón, la miopía generalmente se produce cuando el globo ocular es más largo. También puede producirse cuando el cristalino (un lente natural dentro del ojo) o la córnea (la parte frontal del ojo en forma de domo), son demasiado curvos. Estas irregularidades en la forma no permiten que el ojo enfoque los rayos de luz que entran en el punto adecuado.
El comportamiento más común de las personas miopes generalmente se observa en la escuela, cuando tienen dificultades para leer el pizarrón, o cuando están fuera y no pueden distinguir los letreros lejanos. Ellos pueden ver bien objetos cercanos—como la pantalla de la computadora o el teléfono—pero tienen dificultad para ver la televisión. Los síntomas y signos más comunes relacionados con la miopía son:
La miopía no se puede prevenir y generalmente se diagnostica en niños de 8 a 12 años de edad. Puede avanzar rápidamente en los adolescentes, pero en la mayoría de los casos deja de avanzar por sí sola en la edad adulta temprana. La miopía puede ser alta o baja, y la intensidad y la etapa de la vida pueden influir en las opciones de tratamiento.
Cuando la miopía no es corregida, esto afecta el desempeño y la calidad de vida. No poder ver bien de lejos puede afectar el proceso de aprendizaje para niños y adultos, así como disfrutar el deporte, la vida al aire libre y otras formas de entretenimiento. La seguridad se pone en riesgo para conductores y trabajadores que necesitan una visión clara o que tienen que interactuar con maquinaria. Los dolores de cabeza y el cansancio visual, que se producen como consecuencia, también pueden tener un efecto negativo, por lo que si padece estos síntomas debe consultar a un especialista del cuidado visual.
La miopía puede corregirse en forma efectiva con anteojos, lentes de contacto o con cirugía. Los lentes de contacto blandos son una opción muy conocida y cómoda para muchas personas, y su calendario de uso flexible (diario, semanal o mensual) los hace muy prácticos. La miopía no afecta la salud del ojo, excepto en personas con miopía severa, que tienen mayor riesgo de padecer de glaucoma y otras afecciones graves.